Esta fábula nos ayuda a comprender el mas allá de una vivencia, de acuerdo a una serie de estereotipos determinados. En realidad, nos ayuda a todos a pensar en cómo se puede lidiar con el problema de estereotipar en nuestra propia vida y en nuestras organizaciones. Esta fábula nos inspira y nos regala un consejo fácil y práctico. Seamos grandes receptores, y tratemos de ser perspicaces para llegar a el objetivo. |